MOTIVO

Espacio dedicado a toda clase de comentario libre y espontáneo, despojado de intereses de cualquier tipo (y mujer)

miércoles, 18 de mayo de 2011

"FAVIO Y YO"


Es una buena etapa de mi vida; me siento pleno en muchos aspectos, estoy conforme conmigo mismo, puedo determinar libremente mi destino, elegir mis compañías, la forma como trabajo, los amigos que quiero y me quieren, amar a mi familia, disfrutar mi profesión y hacer de mi vida lo que siento y decido. Como siempre, la vida compensa las cosas, todas estas posibilidades que las decisiones libres ofrecen, son acompañadas por algunas viscicitudes encontradas, las cuales se basan en lo meramente material, que analizadas fríamente, no son lo más importante. Los seres humanos, en un gran porcentaje, somos ingratos con lo que tenemos, con lo que alcanzamos y con lo que deseamos. Muchas veces, estamos insatisfechos con lo conquistado. Cumplimos una meta y ya pensamos en la próxima, sin disfrutar lo que nos está sucediendo en el momento; logramos un objetivo y queremos otro nuevo, inmediatamente. No valoramos como deberíamos hacerlo, la salud que tenemos, el amor que nos rodea, las cosas que hemos adquirido a lo largo del tiempo…, siempre queremos más, permanentemente añoramos lo que vendrá, lo que aún no está, lo que todavía no obtuvimos. Por supuesto que no está mal, seguir avanzando, continuar superándose, intentar un mejor bienestar y cumplir los sueños que la imaginación y las ganas nos ponen por delante, pero a lo que me refiero, es a disfrutar lo que nos toca, valorar lo que hemos conseguido en la vida, lo que conservamos. Sin duda alguna, que todos pasamos por buenas y malas, por mejores y peores momentos personales y profesionales, pero también debemos valorar lo alcanzado, no importa cuán alto haya sido ese logro, qué tamaño tenga, cuanto peso cargue y fundamentalmente, aquellos que tenemos la dicha de tener salud, ser agradecidos por esta feliz circunstancia.

Este prólogo, que sirve como introducción a lo que quiero compartir con ustedes hoy, está despojado de falsas modestias y posturas hipócritas, porque si bien yo también tengo problemas personales y profesionales, procuro transmitir de manera simple y franca, los sucesos buenos que me ocurren. En algunos días más, se edita mi nuevo disco que contiene canciones de mi querido Leonardo Favio. Es un CD que forma parte de un proyecto que basado en el cariño, la admiración y el reconocimiento personal que siento por él, traigo conmigo desde hace un buen tiempo a esta parte. Es para mí un gran orgullo poder compartir públicamente lo que ha significado Favio en mi vida, más allá de su figura popular, de la trascendencia masiva, de sus exitosas canciones y de su respetada cinematografía. Haciendo balances y sacando conclusiones de lo vivido junto a él desde muy niño, puedo asegurar que soy cantante por lo que representó su figura en mí. La admiración que provocó desde mis cinco años y sus treinta y uno hasta el día de hoy, hicieron que siguiera por el sendero artístico, quizás, basado en su imagen.

Atesoro en mi interior y de manera entrañable los infinitos momentos compartidos con él, con Carola, su mujer, con sus hijos Leonardo, Nicolás y María Salomé a quienes desde diferentes lugares y en distintos momentos de la vida, han participado de la mía muy preciadamente.

Este nuevo paso discográfico en mi carrera, no solo es reconfortante artísticamente sino también emocionalmente porque crecí escuchando sus canciones, algunos de los temas que he grabado en este disco, son los mismos que hacía a mis ocho, nueve, diez años cuando me ponía frente a un gran espejo que tenía en el living de mi casa, con mi madre como espectadora obligada y lo imitaba con un micrófono de juguete.

Los temas que contiene esta producción son, en parte, la banda de sonido de un espectáculo basado en anécdotas e historias compartidas con Favio, al que se suman imágenes de su vida y fragmentos de todas sus películas.

Los arreglos y la dirección musical le pertenecen a Sergio Pérez, un músico sensible, detallista, cuidadoso y respetuoso, que sin dejar el espíritu original de cada tema, le da un delicado aire renovado a las canciones. Un gran artista que, a través de mi amigo Manuel Wirzt, descubrí también como una persona de gran valía.

Estoy convencido de que las cosas se concretan en ocasiones y circunstancias determinadas para coincidir, a su vez, con momentos especiales como los que me tocan vivir, ya que este lanzamiento musical (el undécimo de mi recorrido discográfico hasta aquí) se amolda a un renovado impulso de mi camino internacional dentro de la música, donde estoy retomando el contacto con los países que hace un poco más de dos décadas recibieron mis canciones y aún hoy, las mantienen vigentes.

Existe un pensamiento popular que transmite una gran verdad: “A los artistas, los hace la gente” y en estos tiempos confusos donde todo se mezcla y pareciera dar lo mismo el agua que el aceite, (o por lo menos, muchos medios se encargan de mostrarlo así) reafirmo con ganas y placer, que es verdad; los artistas existimos, perduramos y nos consolidamos por la gente. En mi caso particular, debo agradecerle al público que gusta de las baladas, el hecho de haber transformado un par de canciones mías en temas propios de varias generaciones. Y me enorgullece decirlo, ya que gracias a esas melodías y a esas letras románticas, muchos artistas permanecemos en el tiempo, en contacto con aquellos que alguna vez se emocionaron, movilizaron o simplemente entusiasmaron con ellas, a pesar del poco espacio en los medios masivos y la casi nula difusión del repertorio en cuestión que existe actualmente. Y vuelvo a la gente, a los que hacen o no hacen a los artistas, a los que a pesar del lapso transcurrido, de los vaivenes del negocio, de las modas y los gustos, logran conservar esa conexión inexplicable que a veces se da entre el público y los artistas.

Aprovecho este comentario para incluir un agradecimiento sincero y especial para los queridos amigos latinoamericanos que posibilitan mi regreso artístico a lugares entrañables donde he recibido siempre afecto y amor como Chile, Perú, Ecuador, Colombia, Costa Rica, Bolivia, Uruguay, Paraguay, Nicaragua, Santo Domingo, México. En mayor o menor medida, estos países me han brindado la posibilidad de mantenerme en el tiempo, en una profesión donde cada vez se hace más difícil perdurar. Ya no existen más los llamados artistas “de catálogo”, como antes se los mencionaba en el ámbito musical a los que desarrollaban una trayectoria duradera; hoy todo es “éxito para hoy, la nada, para mañana” (parafraseando la famosa frase “pan para hoy, hambre para mañana”).

Estoy feliz por volver a recorrer lugares que conocí desde muy jovencito y que hoy me reciben con la misma calidez de siempre; me siento afortunado de editar un nuevo disco, aunque la industria discográfica se encuentre vapuleada por la piratería y aturdida por Internet; tengo la suerte de grabar canciones que me gustan y emocionan, además de complacer mi alma y espíritu con un reconocimiento público a mi ídolo de siempre: Leonardo Favio.

Espero que les guste y que la opinión de aquellos que escuchen el CD, se acerque, aunque sea un poquito, a las cosas tan lindas que él me dijo, cuando me hizo saber su opinión. Una inmensa satisfacción personal, un gran orgullo que llevo dentro mío y que me acompañará por y para siempre.

sábado, 7 de mayo de 2011

¿POR QUÉ GRITAN LAS MUJERES?

Para comentar la obra de teatro que fui a ver y compartir mi parecer con ustedes, debo despojarme del cariño y la amistad que siento y tengo con el autor y director de la misma, porque de esta manera podré dar mi punto de vista objetivo y distante del afecto personal que me une a su creador intelectual. “¿Por qué gritan las mujeres?” se llama la pieza teatral en cuestión y Pablo Novak, es su escritor y director.
Es la cuarta obra que Pablo escribe para teatro y yo fui testigo (como Arturo Bonín) que durante los largos años que lo conozco, no han sido las únicas que salieron de su cabeza ya que aún tiene en carpeta unas cuantas más, que con el correr del agua que pase bajo el puente, seguramente irán siendo estrenadas a su debido tiempo y armoniosamente (ya que estamos en plan de citar figuras populares, recordamos al General Perón, responsable de haber eternizado esa frase tan sabia y reflexiva).
El título lo plantea de entrada y el desarrollo de la historia, ofrece respuestas sin definir totalmente, ya que abarca muchas otras reacciones y contestaciones internas por parte de cada espectador, basados pura y exclusivamente en por qué misterioso motivo gritan las mujeres. Una madre con dudas y sin mucha autoridad que digamos sobre sus hijas, interpretada por la “Tana” Puerta, Viviana Puerta, actriz que quiero y respeto por su línea y elección de carrera artística, su nobleza como persona y autenticidad sobre y bajo el escenario, que realiza un muy buen trabajo, justo, preciso y cabal, que sobrelleva una relación casi inexistente con su ex pareja, padre de sus hijas, de características particulares; el hombre está ausente, es bastante despreocupado, más bien “colgado” y divertido o por lo menos gracioso en muchos trazos dibujados por el comediógrafo autor de la pieza (continúo distante de mi amigo para no perder objetividad).
Lo recreado en escena por Daniel “el Pollo” Mactas, tiene pasajes muy graciosos y “bocadillos” efectivos que se suman a las presencias preponderantes de su doble descendencia femenina, que a su vez, ambas, no saben muy bien qué hacer con sus vidas. Las chicas, en su respectivos y dispares roles, brillantemente personificadas por Bárbara Merlo (nada que ver con “Mostaza”) y Brenda Ullman (¿será la sobrina de Liv?) comparten sin saberlo (una de ellas… la otra, sí es consciente…) a un muchacho que tampoco sabe mucho lo que pretende de su destino (Fernando Fuscaldo) y que mientras tanto, se psicoanaliza con la madre de sus dos amantes, las hermanas en cuestión. ¿Conté toda la trama? ¿La cagué? Bueno Pablo, si es así, perdón por cebarme, pero lo importante es el contenido, lo que se dice en la obra, los enfoques que cada personaje expresa, sus conflictos, las reacciones, el humor, las posturas, la música, los climas y… los gritos, que en definitiva son los protagonistas del título y motivo esencial de la obra en sí.
Una puesta ajustada, medida y precisa para volcar sobre las tablas, los malos entendidos, algunos disparates, varios desencuentros, mucho humor, ironía, ternura, miedos y fundamentalmente plantear los interrogantes que llevan a preguntarnos reiteradamente, en forma sistemática, casi de manera obsesiva, ¿Por qué gritan las mujeres?
Los invito a que pasen una hora y media entretenidamente y les propongo de manera afable y cordial que el próximo jueves se acerquen al barrio del Abasto (a dos cuadras del Shopping), en el atractivo espacio cultural llamado El Cubo, ubicado en Pasaje Zelaya 3053 a las 22 horas, de manera puntual, con vestimenta casual y/o elegante, (pueden ir sin saco y corbata, aunque hoy en día, el saco y la corbata, han quedado acotados a ciertos trabajos puntuales que requieren cierta presencia formal o se utilizan específicamente en eventuales ocasiones como un casamiento, por dar un ejemplo, y no en todos, ya que muchas veces, los hombres los ponemos en uso, justamente, según los gritos de las mujeres). Para finalizar, acoto la distancia emocional que emplee al comienzo del comentario para evitar confundir el afecto con la percepción de espectador distante y regreso a la calidez de la amistad sincera que me une al amigo y felicito, de corazón, a mi querido Pablo Novak y a todos sus actores, por esta nueva apuesta artística, ingeniosa y creativa, producida por Fernando Safdie, que ofrece una alternativa amena, divertida, interesante y animada para los amantes del buen teatro. Están avisados: próximo jueves, teatro El Cubo, 22 horas, “¿Por qué gritan las mujeres?”… vayan y descúbranlo gratamente.

lunes, 2 de mayo de 2011

GENTE TRAS LAS PAREDES


Reproduzco con gran placer la entrevista que me realizó Oscar Antonio Córdoba para su blog "Gente tras las paredes" porque ha sido muy reconfortante para mí, descubrir el respeto y el afecto que este cordobés, apasionado por preservar hechos, protagonistas y momentos de nuestra vida, volcó en la nota. Es también, una forma de reconocerle su cordialidad, y consideración por elegirme como primer entrevistado de su espacio cibernético, al cual le imprime tanto afecto y fervor.
Por Oscar Antonio Córdoba

Este blog se planeó con varias consignas. Una de ellas, fundamentales en su espíritu, ha sido preservar la memoria, mi memoria, la memoria colectiva de quienes vivimos los 80´y llevamos en ella la idea de una buena época, de un buen momento. No es matar lo que haya quedado fuera de ella, ni creer vanamente que los brillos y destellos se circunscriben a estos 10 buenos años, pero por alguna razón, hay algo que con mucha fuerza, justo en este periodo que encontramos especial. Y recordando de la buena música de aquellos días, se me vino a la mente Orlando Netti. Este muchacho nacido en 1963, quien hoy cuenta con 46 años, que es músico, que trabaja en radio, que ha editado 11 discos, que es un referente y es una estrella en América Latina, que se adueñó en definitiva de una buena parte de esta década, aceptó una entrevista para este blog, que debo decir, ha resultado una experiencia impensada y placentera que sumado a su buena predisposición y entrega ha dado una buena y enriquecedora experiencia que hoy comparto con todos:

Oscar: Predestinado a las luminarias del escenario, las convocatorias masivas, a recorrer Latinoamérica y España con un decisivo impulso, y uno mas tibio en tu país natal, Argentina, tu disco debut fue "Orlando Netti" (1984) ¿Imaginaste tantas satisfacciones con este debut? Con gran single de difusión, Clásico, editado en varios países latinoamericanos e incluso en España, tu comienzo fue, creo, bastante auspicioso… esperabas todo esto?

Orlando: "En realidad, cuando uno empieza esta carrera, no sabe bien cómo sucederán las cosas. Si bien es cierto que la ilusión es el principal instrumento para arrancar y animarse, la suerte también, es un elemento que debe estar presente. Esa pequeña cuota de suerte, es necesaria en cualquier orden de la vida, pero en el ámbito de la música es casi determinante, en el sentido de que si te acompaña, podes trascender y lograr las metas. En mi caso, la suerte me acompañó desde el primer disco, ya que al grabar en una multinacional como CBS, hoy Sony Music, el disco comenzó a editarse en diferentes países y mágicamente, comenzaron a llegar mensajes de las distintas filiales pidiendo por mí. El tema “Clásico” había empezado a pegar muy fuerte en lugares como Chile, Perú, Ecuador, Colombia, Costa Rica... y aquí, en Argentina, si bien había salido el disco al mercado, no me habían dado mucha bolilla en cuanto a difusión se refiere y al ver que llegaban muchísimos pedidos preguntando por mí, prestaron más atención y allí comenzaron a apoyarme más. Cuando digo, “mágicamente”, hablo de que la canción, por esas cosas del destino (y también un poco de la suerte) sin ningún apoyo, ni campaña promocional ni nada, empezó a sonar y meterse en la gente de Latinoamérica y me dio el puntapié inicial para empezar a recorrer diferentes países que me recibieron con los brazos abiertos."
Oscar: Tus próximos 3 discos “Clásico” (1985), “Te quiero” (1985) y “Simplemente” (1986), vienen a reforzar que todo lo que cosecha tu debut musical no es casualidad. ¿Dimensionas que en muchos sentidos fuiste dueño de una buena parte de la década del 80’? Sabiendo que te grabaste en el inconciente colectivo de mucha gente que vivió su niñez, su adolescencia o su incipiente adultez ¿Sos conciente que para bien o mal (a la hora de encasillar) representas para muchos no un tiempo preciso en años sino una época especial en sus vidas?

Orlando: "Sí, la verdad que es muy gratificante saber que uno forma parte de eso que decís. No es fácil lograr llegar al público en forma masiva y mucho menos alcanzar el lugar de referencia que mencionás. Tengo la gran dicha de estar entre los artistas que identifican de esa época maravillosa de los años ochenta con un par de canciones que han quedado marcadas en la gente. Como cantante y músico, ya es muy bueno tener una canción que te identifique instantáneamente con la gente, mucho más si son dos las canciones, temas tan fuertes como “Clásico” y “Recién te conozco y te quiero”, que han trascendido a través del tiempo y no solo fueron éxito masivo en una época determinada, sino que se mantienen vigente en el inconsciente colectivo de varias generaciones en toda Latinoamérica. Estoy orgulloso de ese lugar, de haber logrado mi objetivo inicial, artísticamente hablando y de seguir estando vigente a partir de esos temas y otros discos que vinieron después, que también lograron sostenerme dentro del ámbito musical con mayor o menor intensidad, pero con la misma fuerza, ganas y trabajo que al comienzo."
Oscar: Tuviste influencias muy particulares y precisas a lo largo de tu vida y de tu carrera musical. El nombre de Leonardo Favio (principalmente) y de Luis Aguilé aparece varias veces en la vida de Orlando Netti ¿Qué tan fuerte y que tanto de mentores tienen uno y otro en este camino tan lindo y sacrificado que elegiste?

Orlando: "Bueno, Favio es mi referente más fuerte. Tengo por Leonardo un cariño y admiración que vienen desde mis cinco años, momento en que lo conozco a través de mi padre, con quien eran muy amigos. Siempre cuento que los chicos en la niñez, tienen sus ídolos; en aquella época mis compañeritos de colegio idolatraban a Batman y Robin, Superman, El Zorro... mi ídolo era Leonardo Favio. Al haber vivido tan de cerca su éxito arrasador, primero como cantante y después como director cinematográfico, lo dimensionaban en mí como una imagen muy fuerte. La admiración se entremezclaba con el profundo cariño que él también me demostraba y eso fue tomando cada vez más fuerza hasta llegar, con los años, a transformarme también yo, además de mi viejo, en amigo suyo. Para mí fue increíble y como un sueño realizado, verme alguna vez compartiendo mi nombre con el suyo en uno de esos discos compilados que sacan las compañías discográficas de todos sus artistas. Y la primera vez que coincidí con él en un programa de televisión, donde nos presentaban a los dos como figuras del show.
Con Luis, me une también un gran afecto, ya que también lo conocí desde muy chico y hasta he compartido canciones y giras con él, pero como su residencia en España hacía más esporádico el contacto, quizás no fue tan importante el lazo como con Favio. Después de tantos años, creo que por Favio yo soy cantante; indudablemente esa admiración influyó en mucho para que yo tomara este camino artístico."
Oscar: Que récords más raros y apostillas tan curiosas tiene tu carrera. Repasando:
Tu 1º disco termina editándose casi simultáneamente en 9 países distintos.
Siendo casi un desconocido en tus 1º presentaciones en San Juan y Mendoza llevas 2.000 personas en cada show. Numero nada despreciable para la época.
En diciembre de 1984, se debió cancelar la actuación en Lima, Perú, organizada por Radio Panamericana, porque la policía no podía asegurar la integridad física ante los 19.000 espectadores que se desbordarían si Orlando Netti actuaba.
Plaza de los Toros Acho es testigo de un impresionante recital que das para 22.000 personas.
En tu 2º disco, aparecen 2 canciones inéditas de Leonardo Favio. 1º vez que el autor cede canciones para que la interpretación original sea de otro artista.
En Guayaquil das un recital para 25.000 personas.
Recibís una condecoración de parte del presidente de Perú, Alan García.
Tu actuación durante esa visita a Perú, es transmitido simultáneamente por 2 canales de TV, llegando a una audiencia de 8 millones de personas.
Compartís tablas con uno de los artistas más emblemáticos, Luis Aguile, recorriendo toda la costa atlántica con el espectáculo en 1986.
Una maratón de 95 entrevistas durante tus presentaciones en Perú, para 1987.
Solo para nombrar algunas postales sobresalientes de una carrera fecunda y rica de experiencias. ¿Te ha faltado algo por realizar, algo por vivir en tus experiencias con esta carrera? ¿has tenido algún momento sombrío o algún sinsabor en esta carrera rica de satisfacciones?

Orlando: "En realidad, la vida misma tiene momentos lindos, agradables y otros feos, desagradables; forma parte de lo que nos toca recorrer en este sendero. La carrera artística, no está al margen de esos sinsabores a los que te referís. Es muy difícil lograr una plenitud absoluta y este medio, muchas veces es ingrato e injusto en ese aspecto. Pero, más allá de las idas y venidas, los subes y bajas normales de cualquier trayectoria, no me puedo quejar. He tenido una repercusión bastante rápida desde que comencé a cantar, he logrado posicionar canciones que han quedado marcadas en el público de muchos países, he trabajado en distintos lugares y he conocido gente muy linda, he tenido la posibilidad de desarrollarme también, en otras facetas que la gente no conocía de mí como la conducción, la actuación y la producción, he grabado once discos en veinticinco años de carrera, he ganado muchos amigos dentro de este medio, que hoy son amigos personales y allí también, en lo personal, me siento muy agradecido a la vida por haber conformado una linda familia junto a mi mujer María Laura y mis dos hijos Luca de nueve años y Florencia de cuatro."
Oscar: Para terminar, una pregunta que incursiona en una temática urticante para todo artista que vive de su música, o que ha hecho de la música, su vida. Las nuevas tecnologías están presente en todos lados, y han dado nuevas aristas a la música, y sus intérpretes. Hoy, a diferencia de hace 25 años, si queres podes comprar el disco que tanto te gusta, y ver a tu artista preferido en directo sobre en escenario, pero a diferencia de aquellos años, también podes descargar su música, podes ver sus videos en miles de webs distintas, acceder a sus recitales un par de días después de acontecido el show. En una palabra, la industria musical, tal como la conocemos se ha hibridizado con una realidad donde todo es accesible. ¿Que postura tenes con respecto a esta nueva realidad? ¿Pensás como Elton John, por ejemplo que afirmó hace un par de años que había que prohibir y destruir el mp3 por nefasto? ¿O tu postura se acerca más a la de Radiohead y Prince que ponen al alcance de todos sus nuevas producciones pudiendo descargarlo gratuitamente? ¿O tal vez como Miguel Mateos que al mismo tiempo que añora las frituras embriagantes de un buen vinilo también piensa que es el momento de editar en pendrive?

Orlando: "Creo que uno tiene y debe adaptarse a las épocas. Por supuesto que no me gusta ser testigo de la decadencia de la industria discográfica como industria propiamente dicha. Esto es algo que vengo repitiendo y que les endilgo a los directivos, gerentes artísticos, productores, etc. de cada discográfica porque creo que son los responsables de haber matado la misma industria. Más allá de internet, la piratería, las bajadas gratuitas y todo lo que hoy conocemos, todos los que han ocupado cargos directivos, con poder y decisión de modificar y/o mejorar el mercado y el negocio, por qué no?, no lo han hecho. No solo eso, sino que han colaborado a que esto que hoy vivimos como una muerte anunciada de la industria en sí, se haya hecho realidad casi o se haga realidad en unos años. Es ilógico que un disco que de costo tiene X pesos, cueste en la disquería diez veces más que ese costo inicial. Entiendo que en el medio de la fabricación, existen otros gastos, pero incrementar tanto el precio, en buena medida, ha llevado a que la gente prefiera comprar un disco trucho, mal copiado o de baja calidad a pagar por el original."

"En este aspecto, soy crítico al medio y me hago cargo de ello; ahora en referencia a tu planteo sobre qué postura debemos tomar hoy los artistas en cuanto a las nuevas formas y costumbres de difundir, comercializar y trabajar nuestros materiales musicales, me parece que habría que encontrar un mix entre todas las posiciones que mencionas. Ni un extremo ni otro. No soy quién para dictaminar nada y tampoco estoy capacitado para hacerlo, pero creo que los tiempos que corren nos llevan a encontrar un nuevo mecanismo de marketing y comercialización. Habrá que buscar las formas para que todos podamos seguir viviendo de esto, ya que si lo planteamos en términos artísticos y también económicos, me parece injusto que los que trabajamos para grabar un disco, sea bueno o malo, no importa, eso depende de cada quien, si componemos, tocamos, arreglamos, cantamos y producimos con un costo determinado, algún recupero tendría que haber como hasta ahora."
No es correcto que la gente se baje la música gratuitamente porque esa misma música ha tenido un costo y ese costo, desde algún lugar, tiene que regenerarse. No es fácil el tema porque las costumbres no son sencillas de quitar y tenemos ya instalado en nuestra cotidianeidad, el poder bajar lo que se nos ocurra, de manera rápida y gratuita, pero habrá que encontrarle la vuelta al tema porque de esta manera, cada vez se va a hacer más difícil vivir de esta profesión. Da para mucho más, pero no quiero extenderme para no entrar en algo que es muy específico del mundo musical. Una de las cosas que más lamento de todo esto, es que habiendo tanto talento, haya tan pocos lugares donde poder mostrar lo que se hace. Hay infinidad de pibes que arman sus bandas, chicas y chicos que cantan fenomenalmente, grupos que se juntan y les piden a sus familiares que los ayuden y graban como pueden sus discos, poniendo peso tras peso y después de todo ese esfuerzo, ni las discográficas, ni el medio mismo (radios, canales de televisión, medios gráficos) hacen nada para brindarles apoyo; no hay vías de comunicación para los nuevos talentos y eso ha hecho que Argentina, por ejemplo, haya perdido casi en su totalidad, el mercado musical internacional donde en otras épocas fue permanente líder. Es largo y bastante tedioso el tema, por eso prefiero quedarme con la fe y la esperanza de creer que algo bueno y nuevo está por venir; ojalá que podamos disfrutarlo."
"Gracias, Oscar por tu iniciativa de la entrevista y un saludo muy grande a todos los seguidores de tu blog que imagino, compartirán tu pasión volcada en este interesante espacio cibernético. Un abrazo."

Oscar: Cierro esta entrevista. Y algo en mi ha cambiado. Siempre vi a mis recuerdos como una vitrina, en donde uno dispone en ella los recuerdos en forma cuidadosa y ordenada, con la idea de preservarlas del tiempo. Sin embargo, no puedo dejar de pensar en esta entrevista y en este artista como una puerta, que esta alli, cercana, alcanzable, dinamica como el tiempo, disponible para quien quiera atravesarla y enterarse y dar por enterado que todavia queda mucho por ofrecer...Graciaas Orlando!!!

Para ver y recorrer el blog del amigo Oscar Antonio Córdoba, pueden clickear
Seguramente, se van a entretener y pasarla muy bien.