MOTIVO

Espacio dedicado a toda clase de comentario libre y espontáneo, despojado de intereses de cualquier tipo (y mujer)

sábado, 23 de abril de 2011

NICO FAVIO: TALENTO, CORAZÓN Y ARTE


Muchas veces, la frase “a éste, lo vi nacer” se escucha o se repite para hacer referencia de alguien que uno conoce desde hace mucho tiempo o que quizás, en algún momento de la vida, tuvo contacto personal, trato, comunicación, relación, amistad o simple roce social. En el caso puntual de la persona a la cual dedico hoy mi espacio, puedo decir que literalmente, lo vi nacer. Fue el 1º de septiembre de 1972, yo tenía 9 años y recuerdo el momento con claridad y exactitud porque acompañé a mi madre al sanatorio donde él vino al mundo, para estar junto a su madre, en una circunstancia tan única y especial como es dar a luz al primer hijo. Su mamá es Carola Leyton, alguien que quiero profundamente por formar parte de mis afectos más cercanos desde muy pequeño, por ser una querida amiga de mi vieja, Celia, y por el lazo que la une a otro ser que conozco desde mis cinco años y por quien siento un entrañable cariño: Leonardo Favio. Ese niño que vi nacer, hoy es un hombre que bajo el legado natural que la genética nos inculca, se transformó en artista, continuando el sendero que el destino marcó de su progenitor y heredando el talento del cual es dueño su padre. Por eso hablo de genes, naturalezas y señales, ya que Leonardo, su papá, brindó desde que irrumpió en el medio artístico, primero como actor, después como director cinematográfico y finalmente como cantante y compositor, una facultad única que pocos elegidos tienen.

Nico Favio tiene en su ADN un componente intransferible que lo convierte en un artista con cualidades genuinas, singulares y privilegiadas. Es músico desde muy niño, siempre tuvo esa bella inclinación por la música que lo llevó a formar parte de varios grupos adolescentes y bandas de las cuales participó activamente como vocalista e instrumentista.

Su camino dentro del arte es muy meritorio, mucho más, teniendo en cuenta el peso que significa portar el apellido artístico que tiene y que su seguridad personal más la firme postura elegida dentro del medio, hicieron que sobrellevara de manera sencilla, tal circunstancia. No es fácil para “los hijos de”, despegar del mote en cuestión y emprender su propio camino como lo hizo Nico. Nunca explotó comercialmente su parentesco, nunca se colgó del prestigioso apellido que lleva, nunca cedió ante las imposiciones del cruel mercado de la industria discográfica y las equivocadas influencias que muchas veces rodean a los artistas con respecto a confusas posiciones que algunos intentan inculcar cuando se es joven e inexperto. Siempre tuvo las cosas claras, siempre supo qué era lo que quería para sí mismo, siempre defendió sus principios artísticos e intelectuales y logró una autonomía pura y noble que lo engrandece y lo distingue. Los años de experiencia no son en vano y una de las cosas que siempre rescato del tiempo transcurrido, es justamente el aprendizaje y la valoración que se le debe dar a lo vivido, equivocado o no, rescatando lo bueno y lo importante. Mi querido Nico, lo pudo, lo supo hacer y muy bien.

El cariño que siento por él, es el mismo que puede palpar un hermano mayor y ese afecto sincero, dejando a un costado el sentimiento, no me impide decir que a mi entender es uno de los artistas argentinos con más proyección; un cantante personal, un compositor de letras profundas y melodías bellas, un artista cabal que antepone su lugar en el escenario como forma de posicionarse en la vida.

Ha grabado varios discos, como solista y como integrante de distintas formaciones, dato que mencioné anteriormente, pero su extensa trayectoria, a pesar de ser muy joven aún, lo colocan en un lugar de madurez profesional que hacen de su último CD “Hasta la última gota”, una obra digna de escuchar. Con canciones propias y de autores como Teddy Jauren, Enrique Cadícamo, Nacho Wisky, Ariel Carlino, Kika Child, Anthony Zuñiga, Roberto Grela, Francisco Gorrindo, Charlo y Homero Manzi, nada más y nada menos, el nuevo disco de Nico Favio, es una fiel demostración que no todo está perdido en el mundo musical argentino. Que a pesar de las frías discográficas multinacionales, de los tristes accionares de ciertos directores artísticos y gerentes de la industria de la música, del poco respeto que existe en los medios masivos por los verdaderos artistas y de la sistemática inclinación periodística, radial y televisiva de muchos protagonistas del ámbito popular por establecer la idea de que “todo da igual”, lo bueno, lo malo, lo bello, lo burdo, lo exquisito, lo mediocre, lo brillante y lo opaco, se demuestra que no es así. El talento, a la corta o a la larga, siempre sobresale; por lógica y natural decantación, lo que vale, lo que se hace desde el corazón, lo que fluye con criterio estético y trabajo serio, invariablemente se destaca.

Colaboraron para esta nueva producción de Nico, músicos de la talla de Daniel Berardi, Pablo Berardi, Miguel Ángel Tallarita, Enrique Martínez Rivero, Arturo Bassnueva, Ariel Carlino, Rubén Lobo, Diego Sánchez, Fabián Bertero y Osvaldo Cabrera. El ingeniero de grabación, mezcla y masterización es Lucas Rubistein, excepto en una canción titulada “Canción de juventud”, de la cual participó Oscar Giménez, y que fue utilizada como cierre musical de la última obra cinematográfica de Leonardo Favio, “Aniceto”.

No quiero dejar de mencionar que además del respeto profesional que siento por Nico, valoro enormemente su amplitud de gusto musical, que va desde el rock, pasando por la balada, el folcklore, el tango, guajiras y otros ritmos, hasta la cumbia de su amada Colombia, donde vivió muchos años de su vida en la hermosa ciudad de Pereyra, por el exilio obligado de sus padres en aquellos años nefastos del Gobierno dictatorial. Esa amplia elección, le permiten incorporar e interpretar con gran solvencia, distintos temas que abarcan la interminable combinación de notas que se pueden plasmar sobre el pentagrama.

Todo mi cariño para él, para su madre, mi querida Carola, puntal importante de su desarrollo profesional, para su hermana María Salomé que para mí sigue siendo Pupita, Pupy, también creativa, sensible, tierna, dulce, emotiva y para su padre, Leonardo, a quien admiré desde que yo era muy niño y de quien siempre sentí un especial afecto de su parte, que retribuiré en forma de agradecimiento público muy pronto, con un disco donde interpreto sus canciones y más adelante, con un espectáculo en tributo a su figura.

Mis felicitaciones, una vez más, para Nico por este nuevo disco y por la decisión de llevar adelante sus ideales artísticos y humanos sin medias tintas. Hace unos días, en Facebook, escribí en la presentación de una canción suya para todos mis contactos: “Es un orgullo poder decir que es como mi hermanito. Todo talento, corazón y arte. Señoras, señores… con ustedes… Nico Favio. Los invito, artísticamente, a disfrutarlo.

jueves, 21 de abril de 2011

"UNA QUE SEPAMOS TODOS"

Este blog me permite compartir, además de pensamientos, pareceres y puntos de vista personales, los sentimientos y afectos que a lo largo de la vida, he ido atesorando con simple naturalidad y mucho cariño. Por lo general, uno siempre tiende a ser políticamente correcto cuando se trata de mostrar o mostrarse en público, y sobre todo, cuando lo expuesto queda registrado de esta forma tan directa y espontánea. Todo lo que vuelco en este espacio, es auténtico, nacido de la fluidez de la cotidianeidad y de la propia experiencia de vida. No lo hago con otra intención más que la de dejar testimonio escrito de cosas que me suceden, situaciones que vivo, percepciones que experimento y fundamentalmente, mostrarme tal como soy. No hay nada mejor que poder decir lo que se siente, despojado de intereses y conveniencias. Por suerte, no tengo cuentas pendientes con nadie (más que algún que otro retraso en las cuentas tributarias), nadie me inhibe ni amedrenta, soy autónomo fiscal y personalmente, único responsable de mi destino (para las buenas y para las malas, también) y miro a la cara y a los ojos a todos los que comparten una charla conmigo. Conozco a varias personas y personajes de este medio artístico en el cual me muevo desde muy chiquito, que no pueden o por lo menos, les cuesta lograr este acto tan simple de mirar al otro a los ojos sin sentir aunque sea un pequeño escozor o cargo de consciencia por algún acto que solo su interior conoce. No me quiero desviar del comentario que me movilizó a escribir hoy, sino todo lo contrario, quiero conectar esta libertad que siento y profeso cotidianamente para hablarles de un espectáculo que protagonizan dos amigos míos, a los cuales quiero mucho. Uno de ellos es Roberto Antier, a quien conocí como actor hace 30 años y hoy sigo conociendo como brillante stage manager, productor, puestista, músico y director, entre distintas cualidades que puedo mencionar como las de ingenioso, gracioso y meticuloso. El otro, es Pablo Novak, a quien también conocí por la misma época, pero con menos asiduidad que con el primero; el tiempo y el destino, hicieron que el lazo afectivo se incrementara y hoy pueda decir que ese actor, a quien también descubrí como tal, en la actualidad, sumó condiciones artísticas como las de músico, cantante, escritor, puestista y director, al igual que Roberto y en el que también destaco atributos sobresalientes como la perspicacia, la creatividad y el humor.

Simplemente, quiero recomendarles el espectáculo que vienen representando desde el año pasado en “Clásica y Moderna”, los sábados a la medianoche, donde simbolizan sus 30 años de amistad (los mismos 30 que comparten conmigo, pero entre sí) y recrean muy entretenidamente toda una época que vivimos los que ya pasamos los 40. El título del show lo resume así: “Una que sepamos todos” (tributo a Gachi Ferrari), como una forma de volver a esos años ´70, y ´80 en homenaje a varias generaciones que vivieron un tiempo muy rico en contenido social, intelectual y artístico.

La gacetilla que promociona esta fiesta creativa, donde conjugan humor, canciones y monólogos dice: - El show evoca la música de las últimas tres décadas: desde Bread, Billy Joel o Supertramp, hasta Sui Generis o Vivencia, aquellos temas que fueron la banda de sonido de nuestras vidas. Esta especie de tributo a Gachi Ferrari también incluye canciones propias y describe con humor y sana resignación los cambios de toda una generación. Los artistas ejecutan instrumentos y cantan en vivo -. Agrego al texto que invita a verlos, además de incorporarme efusivamente a esta invitación, que a más de la música y los recuerdos que rememoran, los monólogos que idearon son muy ingeniosos y divertidos, características representativas y destacadas de las personalidades de mis amigos

Se los recomiendo para el próximo sábado o los subsiguientes, con la seguridad de que la pasarán muy bien, acompañándolos mentalmente con cada una de las evocaciones que realizan y con la risa a flor de labios durante la mayor parte de la hora y media que dura el espectáculo.

Ah!, como ingrediente extra, siempre asiste alguna amiga o amigo especial que se suma en una o dos canciones como invitados sorpresa. Yo estuve el día del estreno y compartí “una que sabemos todos”, aunque en las fotos que incluye el álbum de “artistas invitados” que tienen en Facebook, no estoy registrado para dar fe de esto que menciono.

En caso de querer contratarlos para ocasiones festivas, cumpleaños, aniversarios, casamientos, separaciones, bar mitzvah, bat mitzvah (bar para varones, bat para mujeres), en fin... eventos de cualquier índole (bueh, es una forma de decir, tampoco de cualquier especie, aunque si la propuesta es interesante, en una de esas...), pueden comunicarse con la Srta. María José (Srta. suena mejor, porque si antepongo Sra., me da "jovata") al teléfono celular 154-029-3488. Y si deciden reservar las entradas en "Clásica y Moderna" (Callao 892, esquina Paraguay), tienen que marcar los teléfonos de la empresa Entel: 4812- 8707 / 4811- 3670.

Para finalizar, un mensaje para mis “amiccis” Robertino y Pablete… ¡¡¡Felicitaciones!!! Me alegro de cómo se las trasnás y como te lo digo una vez, te lo digo otra vez: “Amigos, son los amigos”, ¡Grande, Pá! ¿Salió Soria? Y por último, “¡Un aplauso para el asador!” Los quiero, hace 30 años que los conozco y los quiero.

martes, 19 de abril de 2011

EL MEJOR COUNTRY ES ARGENTINO

Los músicos, cantantes, compositores, todos los que de una u otra manera formamos parte del mundo de la música, tenemos un punto en común que en algún lugar nos relaciona de modo identificatorio, aunque no sea expuesto. Muchas veces, los egos son precisamente egoístas y no nos dejan fluir naturalmente con el colega, con el compañero, con el par, justamente porque en vez de sentirlo como tal, pensamos que es un rival. Por suerte y gracias al componente que mis padres engendraron en mí, no tengo esa negativa particularidad en mi forma de ser, todo lo contrario, siempre he tratado de colaborar con amigos y conocidos, en la medida de mis posibilidades.
En los últimos años, especialmente en nuestro país, Argentina, donde siempre hubo una marcada diferencia entre rubros musicales, ha roto con las imposiciones y divisiones absurdas que existían en otras épocas en referencia a estilos y personajes. Hace un largo tiempo que hemos aprendido del resto de Latinoamérica, a dejar de lado las falsas posturas y felizmente solemos presenciar uniones artísticas que han incrementado los cruces entre un baladista con una cantante pop, por ejemplo, un rockero con otro salsero, un grupo de cumbia que se mezcla con intérpretes de hip hop, flokloristas y bluseros con gente que hace reggae, alguna agrupación de jazz que se une a un tanguero, en fin, distintas alternativas que ayudan a sumar, en vez de restar como sucedía anteriormente.


El estilo country en español no se desarrolla con gran repercusión masiva en nuestro medio y tampoco se difunde mucho en radios y canales de TV populares, pero a pesar de esta cruda realidad, existen músicos que se dedican a crear y ejecutar el ritmo con gran calidad, mucho entusiasmo, pasión y gran amor por lo que hacen. Es el caso de Yulie Ruth, un hombre que después de tocar el bajo durante catorce años junto a Pappo, Norberto Napolitano, El Carpo (como más les guste recordarlo), decidió darle vuelo a su naturaleza musical y se dedicó a escribir canciones basadas en el country, pero en español. En once años, desde 2000 hasta hoy, realizó cuatro discos propios y un largo trayecto, desde su Bernal querido, en escenarios de todo el país con gran desarrollo y trascendencia. La voluntad es un arma preponderante en Yulie Ruth, su espíritu libre, sin ataduras multinacionales, hacen que su producción sea independiente, como la de tantos artistas contemporáneos que elegimos dejar de lado las disqueras embusteras y embrollonas para llevar adelante el camino (más difícil quizás, pero también más puro) de andar nuestro propio camino sin apoyos de grandes capitales económicos que terminan quedándose no solo con gran parte del dinero de los artistas sino también, con los sueños

Yulie, tiene como compañera de vida y de arte a Vane, que como él, siente, vibra y lleva adelante la bandera del country en español con orgullo y temple. Vane Ruth, lanzó al mercado su primer disco "Pueblo atrás", que merece ser escuchado por los que gustan del country y los que no también, porque descubrirán una voz cálida, armoniosa y con diversidad de matices que vuelca musicalmente bellas composiciones propias con gran talento.

Con su disco debut, la que en sus comienzos fue “La niña mimada”, ahora se está consolidando como “La reina del country en español”, ya que los trece temas que contiene el álbum así lo demuestran. Con producción de Nelson Pombal y el mismo Yulie, con músicos como Charly Arana, Ezequiel Binnewies, Alejandro Piedis, Ricky Alonso, Jeff Colson, Pablo Hadida, Sophie Lüssi, Matías Bahillo, Natacha Seara y la participación especial de Pamela Rodríguez y Antonio Birabent en dos canciones, además del propio Yulie Ruth, grabado en Luján y en Bernal ("Los Pájaros" de Palito Ortega y "Home Studio" de Nelson Pombal), es un CD que recomiendo gratamente. Y en plan de sugerencias, también los invito a disfrutar de “Tan lejos de Texas”, “Renegado”, “Yodels” y “El country vino para quedarse”, los cuatro álbums de Yulie Ruth junto a su banda “Las Ruedas del Sur”. Talentosos artistas y muy buena gente, con valores no solo musicales sino también humanos, cosa no menor en los tiempos que corren. Un gran gusto que me doy en este espacio propio, de presentarlos a quienes no los conocen aún y recordarles sus dotes artísticas a quienes sí saben de ellos, además del placer que el espacio cibernético me regaló al poder conocerlos un poco más a través de este medio. ¡Salud por la música! ¡Salud por el country en español de Yulie y Vane Ruth!

viernes, 15 de abril de 2011

CADA VEZ CAEMOS MÁS BAJO

¿Seré yo que estoy desubicado, desfasado de la realidad, descolocado del tiempo actual o estamos viviendo un momento social inédito que todo, absolutamente todo, pasa por lo material y nada importa más que lograr dinero y más dinero, sin medir morales, vergüenzas, amores propios y dignidades?

Para los que no han leído anteriores pensamientos, ocurrencias, sensaciones y sentimientos míos en este espacio cibernético, aclaro una vez más, que si hay algo que no soy es ser pacato, moralista y retrógrado, todo lo contrario, pero desde hace un buen tiempo a esta parte, encuentro cada vez más difícil aceptar ciertas pautas que se van dando a nivel social, que los medios se encargan de incentivar, de difundir con ansias e inculcar sistemáticamente. No voy a hacer un análisis intelectual de la noticia que acabo de leer en Ciudad.com (un apéndice del portal de Clarín.com dedicado al segmento Espectáculos), ni tampoco pretendo profundizar melodramáticamente el tema en cuestión, sino plantear a quien lea esto, y plantearme también yo, mientras lo escribo, ¿qué pása con la gente, sus decisiones, sus actitudes y sus determinaciones?

HERNÁN PIQUÍN BAILARÁ CON LA ENANA NOELIA EN BAILANDO 2011 dice el título del comentario que me sorprendió llamativamente primero, incrédulamente después y graciosamente, en forma posterior.

Piquín es un excelente bailarín que ha estudiado en el Teatro Colón, con una respetable carrera dentro del arte de la danza, habiendo interpretado roles como bailarín principal y solista, por ejemplo, en la Escuela del English Nacional Ballet y Le June Ballet, de Francia, habiendo sido la estrella central del Ballet Argentino, realizando giras por Europa, Asia, África y todo el continente americano, habiendo interpretado “Medea” (por mencionar una obra) como bailarín principal del Smuin Ballets de San Francisco, habiendo protagonizado el filme “Aniceto”, elegido por mi entrañable y admirado Leonardo Favio, en fin… un artista con un desarrollo artístico muy respetable, que en los últimos dos años, aproximadamente, popularizó su figura a partir de la película de Favio y que en todo su derecho de avanzar en su carrera e incrementar su popularidad, ha intervenido en algunos cuadros coreográficos en el programa de Tinelli, participado como actor en telenovelas y trabajado en teatro en espectáculos revisteriles muy dignos y aceptables. Ahora bien: Me pregunto y les pregunto: ¿Qué necesidad artística, personal y profesional puede tener Hernán Piquín de aceptar bailar con una chica que además de no tener antecedentes artísticos más que hacerse conocer por su condición de enana (Persona que tiene una altura mucho menor de lo normal en los individuos de la misma edad, especie y raza debido a una alteración del crecimiento) y por mostrar sus pequeñas curvas sexies en algunos programas de televisión al ritmo de músicas pachangueras que le permitieran menear su cola, tampoco tiene ningún mérito profesional dentro del medio? Lo pienso un rato y no entiendo, lo vuelvo a analizar y tampoco le encuentro explicación. No lo conozco personalmente a Piquín; tengo entendido que es una persona de bien, respetuosa, seria, muy profesional, buena gente, sus condiciones artísticas lo enaltecen y lo colocan en un lugar de jerarquía y talento muy bien ganado, pero sigo sin comprender qué lo lleva a aceptar esta propuesta de los productores de Ideas del Sur, Pablo "el Chato" Prada y Federico Hoppe, asistentes y estrechos colaboradores de Marcelo Tinelli. ¿El dinero? ¿La fama? ¿La trascendencia masiva? ¿Más dinero?... Lo ignoro, pero de lo que sí estoy seguro es que bajo su consentimiento, de haberse dejado convencer, de haber aceptado la idea de bailar con "la enana Noelia", está siendo cómplice de un show circense que se parece mucho a lo que antiguamente se mostraba en los pueblos como un catálogo de rarezas humanas. Y lo que estamos viendo como espectadores en nuestra televisión cotidiana, es justamente una caterva de exponentes que se prestan al juego de los que manejan los canales en forma burda, morbosa e inescrupulosa.

Parece ser que el juego está planteado así, que los que deciden los contenidos de los programas, los que posibilitan la concreción al aire de los ciclos que priorizan lo banal y el mal gusto, bajo el amparo de ser programas de entretenimiento y “si no te gusta lo que ves, cambiá de canal”, están decididos a seguir por este carril degradante en pos de “darle a la gente lo que la gente quiere ver”. ¿Y qué carajo saben ellos lo que la gente quiere ver?… Podría continuar con mi pensamiento y se me ocurren un montón de frases y oraciones para seguir sobre el tema, pero se hace muy largo y no es la intención transformar esto que nació como un comentario gracioso que quería incluir aquí, en un texto eterno que desvirtúe la esencia del mismo. Los que tienen televisión HD (High Definition), Televisión con ALTA Definición, no la van a poder ver a Noelia, no? (¡CUAC!) (Lo que pido es que nadie se sienta ofendido por este chiste como un acto de discriminación, porque si vamos a hablar en serio, no existe nada más discriminatorio, discriminativo y discriminador que referirse a esta chica Noelia Pompas, como lo hacen todos los que la presentan, como “La Enana Noelia”… aunque si lo analizamos fríamente, la realidad indica que es enana y entonces por qué no decirle enana, aunque suene crudo. Vivimos una era donde las contradicciones se entrecruzan constantemente y todos, en un punto, somos contradictorios. Por eso, me voy a postular para ir a “Bailando por un sueño”, haciendo pareja con la mujer barbuda, la fémina que nunca se depiló en su vida o la exponente de pechos más grandes de la Argentina.

Una cosa más: El cantante, el actor, el bailarín, el coreógrafo, el periodista, el escritor, el sonidista, el hombre de cámara, el director, el espectador, en realidad, todos nosotros, nosotros mismos, somos los que estamos siendo discriminados por esta televisión que no es apta para todo público y solo hecha para los que ellos creen que son los que consumen este estilo de producto. Los directores artísticos y dueños de los medios, supuestamente, están capacitados para programar una buena televisión y tienen todas las herramientas para así hacerlo, pero ellos SÍ nos discriminan a nosotros como sociedad, (me refiero a una gran cantidad de espectadores), dejándonos marginados de una televisión con calidad, eligiendo discriminarnos esencialmente, al llevar adelante un mayor porcentaje de esta televisión agraviada, degradada y rebajada. Es lo mismo que el caso de un diseñador, que tiene los elementos para hacer ropa abarcando todos los talles y solo se dedica a confeccionarla para gente delgada.

Les pido un solo favor, si todo el año la tele va a girar en torno a parejas como Hernán Piquín y "la enana Noelia", háganla corta (otro ¡CUAC!).